23 de septiembre de 2016

Cómo NO reaccionar ante una mala crítica

Como autores, tenemos que tener muy claro que en cuanto publicamos un libro nos exponemos a la reacción del público, y que esa reacción puede ser buena, mala o muy mala. De hecho, es muy probable que en algún momento nos encontremos con una crítica horrible, destructiva, de esas que destrozan nuestro ego y nos dejan con ganas de quedarnos en un rincón en posición fetal durante varios meses. Es imposible que gustemos a todo el mundo, eso es algo que tenemos que tener bien claro antes de publicar nuestras obras. Pero, además, es incluso posible que alguien nos haga esa crítica a mala uva (aunque ocurre mucho menos de lo que nos gusta creer; y es que todos preferimos pensar que nos atacan sin motivo y por pura maldad a darnos cuenta de que igual nuestro libro no ha gustado a esa persona por cualquier razón…)

Ante las críticas negativas, sean del tipo que sean, hay varias formas de reaccionar.

Antes de empezar, me gustaría poner un ejemplo de lo que nunca, jamás, bajo ningún concepto, se debe hacer: 


Dos formas de reaccionar: la defensiva, y la constructiva.

Dentro de la defensiva, la única «buena» es ignorar la crítica. Y pongo «buena» entre comillas porque siempre, siempre, siempre tenemos que aprender de las críticas, incluso de las más destructivas; pero, de cara al público, hacerse el loco es la forma menos negativa y perjudicial de reaccionar. ¿No te gusta esa crítica? Cállate. No digas nada. No digas nada, que todo se te puede volver en contra.

Otras formas defensivas de actuar frente a una crítica negativa pueden (y generalmente consiguen) hacer que la gente se enfade con nosotros, se burle, reaccione atacándonos, cualquier tipo de reacción que para nosotros, como autores que dependemos de nuestra imagen para vender libros, al final resultará infinitamente más perniciosa que para quienquiera que haya hecho la crítica. Eso también tenemos que tenerlo claro: por buenos que sean nuestros argumentos, por grande que sea el número de nuestros aliados, discutir una crítica SIEMPRE se nos va a volver en contra. Y siempre va a hacernos mucho más daño a nosotros que a ellos, sean «ellos» quienes sean. Negar lo que dice la crítica, poner excusas, restar importancia a la crítica, o (por favor, NO) atacar a la otra persona con el argumento que sea… es el camino más corto hacia un varapalo en esa imagen pública que tanto nos estamos currando. De modo que es preferible no decir nada, actuar como si no hubiéramos visto esa crítica, incluso dar las gracias educadamente y salir por la puerta. Cualquier otra reacción defensiva es MALA.

Otra forma de reaccionar ante una crítica negativa es la constructiva. Y esta es la mejor forma de reaccionar, por supuesto: siempre provoca una reacción positiva (salvo que el crítico haya ido «a hacer daño» de verdad, en cuyo caso siempre quedará él peor que nosotros si su respuesta es otro ataque), y contribuye a mejorar nuestra imagen.

¿Y cómo se responde de forma constructiva? Para empezar, guardando siempre las formas y siendo exquisitamente educados. Y, sencillamente, escuchando/leyendo esa crítica, entendiendo lo que realmente esa persona nos está queriendo decir y respondiendo reconociendo el error (si existe), aceptando la opinión de la otra persona aunque no la compartamos (siempre reconocer la validez de una crítica, aunque no estemos de acuerdo con lo que dice), tomando nota, aprendiendo, explicando que se tendrá en cuenta el contenido de la crítica para próximas novelas.

Y, si es una crítica destructiva, hay dos formas de responder: o bien con la callada por respuesta (lo que comentábamos arriba) o bien intentando reconocerle una parte de razón pero expresando la parte de la crítica con la que no estamos de acuerdo. Por ejemplo, si alguien dice «Este libro es malísimo, está lleno de faltas de ortografía», podemos responder «Es cierto que algunas erratas se me han escapado, pero me gustaría conocer el resto de tus argumentos para decir que el libro es malísimo». Aunque, sinceramente, no sé si merece la pena el esfuerzo…

Lo que sí deberíamos tener claro antes de reaccionar ante cualquier crítica es lo siguiente: una mala crítica no tiene por qué ser algo negativo. Siempre que no reaccionemos mal, una crítica mala puede incluso venirnos bien.